Ante tanto
chuzo de punta como nos están lloviendo
el estado de ánimo es fundamental para encarar las cosas. Inyectar algo de confianza
tendría que ser obligatorio. Aunque cueste, aunque sea prácticamente imposible,
se debería intentar. Y en este asunto los medios de comunicación son una parte
fundamental. El derecho a la información es algo innegociable. Saber lo que
sucede a nuestro alrededor nos hace libres. Pero hay muchas maneras de informar
sin faltar a la verdad. Y creo, personalmente y desde mi modesta opinión, que
no lo están haciendo bien. Si de algo estamos faltos es de dos cosas. Que
alguien de los que mandan parezca saber que hacer con el timón, que tenga claro
el rumbo a seguir aunque cueste sangre, sudor y lágrimas (como ya está
sucediendo) y algo, solo un poco, de una cierta tranquilidad. Tranquilidad a la
que parece ser ajeno el llamado cuarto poder. Desayunarse con los titulares
de prensa y las tertulias radiofónicas es enfrentarse a adjetivos y cabeceras
repletos de palabras como las que siguen…Desplome, asfixiados, derrumbe, caos,
ruina, hundimiento, desmorone, derribados, ahorcados, ahogados, oprimidos,
cataclismo, catástrofe, desastre, hecatombe, tragedia, naufragio…No sé, creo
que no es lo mismo para el lector o el oyente leer o escuchar “La bolsa cae”
que “La bolsa se desploma”. O “La economía sigue bajando” a “La economía se
desmorona”. O “No queda más remedio que seguir apretándose el cinturón” a “Nos
condenan a la asfixia”. Si, son sinónimos y tienen un significado parecido pero
la percepción no es la misma. La alarma social que se crea con unos u otros
calificativos no es igual. Todos somos conscientes de la grave situación a la
que nos enfrentamos. Pero no nos hace falta que encima la magnifiquen con
epítetos grandilocuentes en la búsqueda del encabezado más derrotista posible.
Eso buscan los medios; alarmar. Son la gran mafia del siglo XXI.
ResponderEliminarVaya colección de 'epitetos' que has extraido. Creo que es más grave la manipulación de la información que el negativismo pesimista de la prensa. Solo hace falta ver dos cadenas de tv de signo diferente, para apreciar como se manipula la información. Lo mismo ocurre con un periódico u otro.
ResponderEliminarDe todos modos no se que desmoraliza más, si el uso de epítetos por la prensa o ver cada día como la manada de cargos políticos 'mangantes' se quedan con nuestro dinero y no pasa nada. A veces parece esto una república bananera.
Saludos.
A mí también me aterra más la manipulación o el papel de "lavacerebros" que hacen cadenas como Intereconomía, que los titulares alarmistas.
ResponderEliminarEs cierto que abusan de ellos y eso va un poco con la búsqueda de la espectacularidad a la hora de dar las noticias, sin importar mucho si eso provoca en el receptor una buena o mala digestión. Lo importante es vender.
Y la prensa, como todo desgraciadamente, no pone reparos en hacer lo que haya que hacer para conseguir vender más.
Los politicos y medios de comunicación se alimentan y se refuerzan transmitiéndonos el miedo. Es la nueva doctrina del siglo XXI, no hay más.
ResponderEliminarMás que nunca, hay que ser fuertes, positivos y tirar pa'lante!!
Saludos.
Poniéndonos más "conspiranoicos" y creyendo lo que escribe Klein en "la doctrina del shock", todo esto no deja de ser una estrategia para crear el peor de los escenarios y las burradas en formas de recortes (en el libro se va más lejos) tengan aceptación por parte del "pueblo".
ResponderEliminarBueno, ya sabes aquello de que una noticia no te estropee un buen titular. Pues eso. Mira incluso como han evolucionado las portadas de la prensa, o de parte de ella (Razón, ABC, Periódico, Público... antes del cierre). En fin, buscad ópticas distintas y de distintas fuentes... o id a la fuente directa. A veces es mejor.
ResponderEliminarSaludos, Manel
Hace poco lei que x internet hay un diario solo de buenas noticias o del optimista, no recuerdo.. Pero me parecio una gran idea !!!!
ResponderEliminarBuf manel. Dejé de ver y leer noticias, no puedo más. Mi visión positiva la intento sacar de lo que tengo más a mano, lo demás es basura. Pero creo que todo eso que cuentas tiene su razón de ser, el miedo es poderoso, es el arma más potente que tienen ahora los poderes fácticos y es lo que se fomenta. Yo animo al personal a que deje de ver esas noticias y se fije más en lo que le rodea, que intente hace lo mejor que pueda con lo que tiene, y que se queden con sus putas noticas. Saludos Manel.
ResponderEliminarEntre el miedo y la manipulación partidista, la prensa hoy es tan peligrosa o mas que los políticos que la dirigen, somos dianas sobre las que unos y otros disparan dardos venenoso, el veneno es el miedo claro, y el premio nuestro bienestar. Aburrimiento.
ResponderEliminarSaludos.
El gran problema que yo veo en los principales medios de comunicación, sobre todo en prensa escrita (papel), es que están "vendidos". Falta de financiación. Y claro, sobreviven gracias a titulares sensacionalistas, o una publicidad que les da de comer (ojo con morder esa mano...) lo cual resta credibilidad, rigor y todos esos valores que se presuponen intocables del buen periodismo. Algunos da pena leerlos, parecen panfletos... Bajo mi punto de vista, la profesión está más en crisis que nunca, aunque siempre hay excepciones, claro...
ResponderEliminarSaludos
Hace tiempo que dejé de confiar en los medios de comunicación, caminan mano a mano con los políticos que les proporcionan favores. Son la perfecta simbiosis. Tengo amigos periodistas, no hablo por hablar, y cuando los azuzo no pueden rebatirme, se quedan sin argumentos...
ResponderEliminarUn saludo.