Sacar este compacto de la caja, introducirlo en el reproductor y pulsar el botón de “play” nos lleva a realizar un viaje en el tiempo. A un tiempo en el que los “Bluesman” se ganaban la vida viajando de pueblo en pueblo, con la única compañía de la funda de su guitarra para cantar sus canciones de miseria y desamor ante una población ávida y necesitada. Una población anhelante de tener un rato de esparcimiento y jarana que aliviara la dureza de la vida en el campo o el trabajo de sol a sol, escaso y mal pagado, en ocupaciones miserables. A un tiempo en que el KKK imponía su ley en ciertos estados del sur a base de cruces de fuego y la gente redimía sus pecados del viernes o el sábado por la noche, alcohol y mujeres de mala vida, en homilías dominicales de luz y salvación. La banda del Reverendo nos envía directamente a la música de Charley Patton, Bukka White, Otha Turner, Mississippi John Hurt, Furry Lewis, Son House, Big Bill Broonzy o RL Burnside, Blues casero, nacido de la tierra, tocado con el alma y directo al corazón del que lo escucha. Como Robert Jonson hasta las cejas de Crack, así los ha definido la prensa especializada norteamericana y no van faltos de razón. Y es que la actitud del Punk y la fiereza del Rock están asimismo presentes en este trío de majaras “White Trash” que extraen de sus instrumentos, dobro, tabla de lavar y una batería reducida a su mínima expresión, un sonido crudo y remoto propio de los años 30 y que ahora, en pleno siglo XXI, todavía se impone por su decidido carácter y su atávica fuerza. Producido por Paul Mahem y el gran Jimbo Mathus, “Big Damn Nation” (2006) fué mi primera toma de contacto con ellos, registrado en directo, de una sola toma y sin ningún tipo de retoques posteriores. No aptos para pusilánimes, aquí hay más azufre que en los dominios de Satán.
miércoles, 3 de marzo de 2010
REVEREND PEYTON'S BIG DAMN BAND
Sacar este compacto de la caja, introducirlo en el reproductor y pulsar el botón de “play” nos lleva a realizar un viaje en el tiempo. A un tiempo en el que los “Bluesman” se ganaban la vida viajando de pueblo en pueblo, con la única compañía de la funda de su guitarra para cantar sus canciones de miseria y desamor ante una población ávida y necesitada. Una población anhelante de tener un rato de esparcimiento y jarana que aliviara la dureza de la vida en el campo o el trabajo de sol a sol, escaso y mal pagado, en ocupaciones miserables. A un tiempo en que el KKK imponía su ley en ciertos estados del sur a base de cruces de fuego y la gente redimía sus pecados del viernes o el sábado por la noche, alcohol y mujeres de mala vida, en homilías dominicales de luz y salvación. La banda del Reverendo nos envía directamente a la música de Charley Patton, Bukka White, Otha Turner, Mississippi John Hurt, Furry Lewis, Son House, Big Bill Broonzy o RL Burnside, Blues casero, nacido de la tierra, tocado con el alma y directo al corazón del que lo escucha. Como Robert Jonson hasta las cejas de Crack, así los ha definido la prensa especializada norteamericana y no van faltos de razón. Y es que la actitud del Punk y la fiereza del Rock están asimismo presentes en este trío de majaras “White Trash” que extraen de sus instrumentos, dobro, tabla de lavar y una batería reducida a su mínima expresión, un sonido crudo y remoto propio de los años 30 y que ahora, en pleno siglo XXI, todavía se impone por su decidido carácter y su atávica fuerza. Producido por Paul Mahem y el gran Jimbo Mathus, “Big Damn Nation” (2006) fué mi primera toma de contacto con ellos, registrado en directo, de una sola toma y sin ningún tipo de retoques posteriores. No aptos para pusilánimes, aquí hay más azufre que en los dominios de Satán.
Gracias por esta interesantisima recomendacion.Ahora mismo me sumerjo en su busca.
ResponderEliminarUn abrazo
Sí, no suenan nada mal sus influencias. Gracias Manel.
ResponderEliminarSalud.
Hola crack.
ResponderEliminarDos cosas.
1.- No sabía de su existencia.
2.- "A un tiempo en que el KKK imponía su ley en ciertos estados del sur a base de cruces de fuego y la gente redimía sus pecados del viernes o el sábado por la noche, alcohol y mujeres de mala vida, en homilías dominicales de luz y salvación" Muy buena frase, realmente muy buena. Te veo inspirado.
Un saludo.
Suena curioso, la cancion que he escuchado cuanto menos. No es lo mio, pero tampoco esta nada mal.
ResponderEliminarSaludos!!!!
Pues suenan de puta madre... Lo jodido sera encontrar sus discos.
ResponderEliminarBueno, la red está llena de recovecos....jajajaja
ResponderEliminarGracias por la recomendación amigo. Ni idea de esto pero me lo apunto desde ya!.
Saludos
moooola ,de estos tampoco sabia de su existenía, a lo que voy a poner remedio.Interesante recomendación.
ResponderEliminarSaludos