Desde la aparición en el año 2.004 de su primer trabajo, el homónimo “Tishamingo”, los de Georgia estaban considerados como la eterna promesa, los primeros candidatos a ser la nueva sensación, los máximos aspirantes a jugar en las grandes ligas. La expectación antes de la aparición de su segundo disco era enorme, habían sido nominados como mejor nueva banda en los Jammy Awards y todo estaba preparado para su definitiva explosión. Pero “Wear n’ Tear” no cumplió las expectativas, a pesar de contener tres o cuatro buenas piezas era un disco frío y carente de “punch”, mal producido y con un contenido irregular y algún error de bulto como la innecesaria y deslucida versión de “Poison Whiskey” de los Lynyrd Skynyrd o “Magic” y “Rome”, dos pomposos y fallidos temas que a mí, que había depositado tantas esperanzas, me hacian pensar que había que empezar a olvidarlos. Nada bueno presagiaba la elección de John Kurzweg para producir su continuación, en su currículo encontramos nombres como Creed o Puddle Of Mudd, argumentos más que suficientes para ponerse a temblar. Pues bien, a la tercera fue la vencida, “The Point”, tocado por la varita mágica de la inspiración, es un disco con garra y músculo, sin altibajos y con unas canciones de una calidad mayúscula. Pisan con seguridad el siempre resbaladizo terreno de las Jam Bands (“This Time”, “Hard Fall”), componen baladas con cuerpo y alma punteadas por una suprema “slide” como es el caso de “Mitchell” y salen airosos de afrontar el desafío de adaptar “Chest Fever” de The Band. Y si hablamos de Southern Rock de raigambre clásica pero de sonido totalmente actual hay que referirse a composiciones que hubieran firmado los mismísimos Allman Brothers de su mejor época como la inicial “Get On Back”, “Are We Rollin’” o “Travel On”, en “Bad News” se endurecen notablemente con protagonismo absoluto para la pareja de guitarras, flirtean con el Country más perezoso en “Devil’s Love Song”, hacen que el espíritu de Little Feat impregne “Walkin’ Shoes”, pegadiza tonada que debería sonar en las radios de todo el mundo y llegan a la cima con “Tennessee Mountain Angel” y sus más de seis minutos de pura fuerza sureña. Editado en el año 2007, The Point es uno de los mejores discos de Southern de los últimos tiempos. Si no lo habéis escuchado, poned remedio. Me la juego a que os gustará.
Gran disco si señor y me gusta un monton. Lo voy hacer sonar ahora mismo.
ResponderEliminarUn abrazo
Las jam Bandsa no son lo mio, pero buena crónica man. Saludos.
ResponderEliminarYo me quedo get on Back que en el Spotify suena genial.
ResponderEliminarJoderrrr manel...no los conocía....pero después de leerte voy a por el pero ya!!
ResponderEliminarya estoy tardando!!
abraxos!!
Si señor Manel,para mi gusto muy buena banda.Recuerdo que antes de salir “Wear n’ Tear” la gente estaba super ansiosa por ver el disco en la calle y una vez salio el apagon fue muy rapido,lamentablemente el disco era bastante flojo,es mi opinion.Pero luego vino “The Point”,el cual contenia toda la frescura que le faltaba a su predecesor,ademas de contar con una version del “Chest Fever” que quitaba la respiracion.Gran cronica Manel.Un saludo.
ResponderEliminarA por él de cabeza. Cumplen todos mis requisitos, jajaja.
ResponderEliminarGracias por la recomendación.
Pues voy a intentar escucharlo, porque el primero lo tengo, pero cuando escuche el segundo me lleve un leve chasco y mas caso no les hice.
ResponderEliminarSaludos!!!
Manel, ni idea de su existencia. Acabo de descubrirlos leyéndote.
ResponderEliminarUn saludo.
Ni pajolera idea, maestro!
ResponderEliminarEl nombre del grupo parece un cruce entre los bloggeros Tsi-Na-Pah y Txinomandinga, jejeje.
Amo el southern y prometo poner los cinco sentido a este "The point"
Gracias por la recomendación.
Saludos.
Pues con todo lo que cuentas no será yo la que me quede sin escucharlo.
ResponderEliminarSalud.
Este disco me lo compre por ebay de una tienda americana ya hace dos años, y realmente suenan muy bien.
ResponderEliminarUn saludo.
Todo un discazo como lacopaunpino!
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